El Amazonas es uno de los destinos más exóticos de Colombia; es un paraíso lleno de animales únicos como el delfín rosado, paisajes impresionantes, árboles enormes, ríos caudaloso y grupos indígenas que conservan sus tradiciones culturales y están dispuestas a recibir a visitantes que quieran compartir y aprender de su forma de vida.

Un buen punto de partida para explorar la selva del Amazonas es el Parque Nacional Natural Amacayacu, cuyo nombre significa ‘río de las hamacas’ en lengua quechua. Los viajeros pueden pasar la noche aquí y observar cerca de 470 especies de aves, entre ellas guacamayas y papagayos; así como una variedad amplia de reptiles, anfibios y mamíferos como los delfines rosados.

Los grupos indígenas conceden a este territorio una multiplicidad étnica incomparable. Conocer sus rituales, cultura y creencias, interactuar con los líderes de las comunidades y comprender su relación con la naturaleza es una experiencia única que evoca el encanto auténtico del Amazonas.

Este maravilloso hábitat acoge tantas especies de fauna y flora como ningún otro ecosistema en el mundo y es un lugar sorprendente no solo por la diversidad cultural de sus pueblos indígenas, sino por la vida que se origina y se nutre de las múltiples orillas del río Amazonas, el más caudaloso, ancho y profundo del mundo.

El paisaje de la amazonia colombiana es un tapete verde tupido con árboles apretujados tan altos como un edificio de diez pisos, que albergan a diferentes especies de aves que armonizan el lugar con su canto.

Las Artesanías que usted puede encontrar Fibras, maderas, cortezas y arcillas son los elementos que las comunidades indígenas moldean para darle vida a verdaderas obras de arte como mochilas, esculturas, vasijas y muchas cosas más, que son representación de su legado cultural.

No te puedes privar de probar la comida exótica de este lugar. El ingrediente protagonista en la gastronomía del amazonas es el pescado de agua dulce; en las aguas de esta región se puede pescar el pirarucú, un pez que puede medir hasta tres metros. También se pueden degustar otras especies como el dorado y el pintadillo, ideales para asar en hojas de plátano que les da un sabor especial. Otro plato típico es el mojojoy, una larva perfectamente condimentada y cocinada, a esta se le adjudican altas propiedades nutritivas. Aquí se pueden probar el mojojoy, un gusano que vive en una palma y se come frito; y el casabe, hecho a base de harina de yuca.

Quienes visitan esta región de Colombia se llevan recuerdos imborrables, porque los paisajes del Amazonas se convierten en postales llenas de vida que maravillan a cualquiera: espesas selvas, animales exóticos, sabores desconocidos y mucho más, todo en una región que con su riqueza cultural y natural contribuye al crecimiento de un país que tiene todo para ofrecer.